lunes, 28 de julio de 2008

El Perú urbano, no es reggaetonero

Muchas veces se hace la analogía equívoca, de que el reggaeton es el retrato de las calles. Esto no es necesariamente cierto. En realidad, en nuestro Perú, a esta realidad cantaron mucho antes y con mayor talento y tino, los inefables grupos del rock de azotea y los actuales de rock fusión.

Comparemos pues, la visión simplista que nos ofrece el reggaeton, aquella de la cual diría Julio Ramón Ribeyro "un mundo fabricado de barro, rugidos y absurdas penitencias".

Molicie, insatisfacción sexual, deseos deleznables, humanos devenidos en meros consumidores, roídos todos por la misma lepra del conformismo, el de la mano corta para hacer poco, o en el peor de los casos, nada; muertos a temprana edad, de algún accidente cerebrovascular, del asesino de iniciativas, que se asegura su neuronal cosecha día a día. Es como morirse dentro de un campo de concentración del pensamiento, como asfixiar en cámaras de gas, la percepción de la realidad.

Sin embargo, fue un escenario, no sólo de derrota, sino de lucha del hombre peruano, específicamente limeño, el que los trovadores de Los Mojarras nos ofrecieron, en medio de la barbarie de los 90's.



Y para completar el owned: La Sarita. Con un personaje de esta Lima que se queda.



¿Así que sólo el reggaeton puede retratar el lado bizarro de nuestra ciudad? Como dirían los Mythbusters: MENTIRA.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Saben por que el regetón no retrata a las sociedades?, por que fue hecha para alimentar a las disqueras bajo la ignorancia de las mayorías, sino sólo basta con oír a su ¿cantante? de bandera: daddy yankee, o para hacer creer que cualquier man puede hacer música, sólo basta con oír a nigga y su te quiero bobow 15000 veces

Anónimo dijo...

callen giles